El territorio donde vive el pueblo Lezghin está dividido en dos partes, entre dos países. La parte norte está localizada en la República de Dagestán, una de las regiones de la Federación Rusa; mientras, la zona sur está en la República de Azerbaiyán. En Dagestán, los Lezghins son una de las 14 naciones. Esta separación tiene un fuerte impacto en la etnicidad Lezghin, porque las personas están divididas entre dos países. La frontera con Azerbaiyán rompió los vínculos familiares, económicos y culturales con la nación Lezghin unificada. Sin una debida determinación de su estatus, la preservación de la identidad de los Lezghin corre un grave peligro.
El principal problema que afrontan los Lezghins es precisamente su falta de estatus, lo cual les impide asegurar sus derechos como una nación en el territorio donde residieron tradicionalmente. Como resultado, se ha desvanecido la etnicidad de los Lezghins y se deteriora su situación socio-económica.
Las autoridades gubernamentales de Dagestán se formaron teniendo en cuenta la composición étnica de su población; pero sin una clara regulación, lo que ha propiciado un desbalance en las instituciones políticas. Como resultado de esto, los Lezghins están mal representados en los cuerpos gubernamentales. Esto es particularmente importante, porque en Dagestán existe un elevado nivel de corrupción y un sistema de clanes que afecta al bienestar de los Lezghins. El sur de Dagestán recibe menos fondos, su economía y esfera social están poco desarrolladas y el nivel de desempleo es muy alto.
La Organización de las Naciones Unidas no Representadas (UUN) aboga por una campaña pacífica para el reconocimiento del pueblo Lezghin, como un grupo étnico con estatus legal, que mantenga su idioma y derechos políticos; así como pide la restauración de su derecho inalienable de existir como nación en el territorio donde residió tradicionalmente ese pueblo. La UUN considera que la Federación Rusa y Azerbaiyán deberían avanzar hacia la total restauración de los derechos de los Lezghins, en concordancia con los principios universalmente reconocidos en las leyes internacionales y en un diálogo constante con los representantes de la comunidad Lezghin.
Una de las organizaciones más fuertes y con mayor apoyo popular es la Autonomía Federal Nacional y Cultural Lezghin (FLNCA), que representa al pueblo Lezghin ante las autoridades de la Federación Rusa. Los principales objetivos de la FLNCA son la protección, preservación y el desarrollo de los intereses nacionales y culturales de los Lezghins.
Para su total desarrollo, los Lezghins, divididos por fronteras estatales, deberían recibir un estatus legal en las tierras donde han residido históricamente. Esto haría posible la preservación de su cultura e idioma. Para obtener todo esto, resulta imprescindible la creación de una autonomía nacional territorial.