Los turcos iraquíes están concentrados en las provincias de Mosul, Erbil, Kerkuk, Salahaddin y Diyala. Ellos constituyen el tercer mayor grupo étnico en Irak, después de kurdos y árabes. El número de turcos iraquíes está estimado en 3 millones, lo que representa el 13% de la población iraquí.
La región en la que viven los turcos iraquíes tiene muchos recursos naturales, especialmente petróleo y gas. Además, allí existe una amplia producción de algodón. Los turcos iraquíes se distinguen de sus vecinos árabes y kurdos, tanto por el lenguaje como por la cultura. Esto ha influido en que se les niegue constantemente sus derechos políticos y sufran con mucha frecuencia la llamada “asimilación”.
Los turcos iraquíes han sufrido diversos grados de supresión y asimilación que va desde la persecución política hasta el exilio y el terror. Uno de los hechos que demuestra lo anterior fue la Masacre de Kerkuk, ocurrida el 14 de julio de 1959, perpetrada por grupos separatistas y comunistas. El objetivo de los terroristas era atemorizar y limpiar étnicamente la ciudad, es decir, sacar a los turcos iraquíes.
Otro paso en contra de los kurdos iraquíes fue la “asimilación”, un programa que se convirtió en política de estado desde 1971, cuando la Asamblea General del Partido Baaht decidió completar la arabización de Kerku, en 1980.
Recientemente, el Parlamento Europeo adoptó una Resolución relacionada con los grupos minoritarios iraquíes, entre ellos los turcos iraquíes. En dicha Resolución se condenaron los ataques contra la comunidad turca y se aclaró que “a pesar de las referencias en la Constitución a los derechos de los turcos iraquíes y otras minorías, estas continúan sufriendo violencia étnica sectaria y discriminación”. Además, el Parlamento Europeo le pidió al gobierno iraquí “adoptar las medidas necesarias para ofrecer seguridad y protección a todos los ciudadanos en general y especialmente a minorías étnicas y religiosas en particular”.
La Organización de las Naciones Unidas no Representadas (UUN) apoyó la Resolución, porque esta ayudará a los turcos iraquíes. El documento llega en un momento crucial para la comunidad turca en Irak, donde a menudo son víctimas de violentos ataques sectarios. Por ejemplo, el 23 de enero de 2013, un suicida explotó una bomba, dentro de una mezquita, durante un funeral de un civil turco iraquí y mató a 42 personas. Lamentablemente este no fue un hecho aislado. La violencia y la intimidación se han convertido en parte diaria de la vida de los turcos iraquíes quienes están en el medio, como daños colaterales, de los conflictos entre los árabes y la población kurda en Irak.
Existen diferentes organizaciones que buscan una mayor autonomía para los turcos iraquíes. Entre ellas aparecen: el Frente de Turcos iraquíes (ITF) y el Partido Nacional Turco Iraquí (INTP).